Una Ostomia es un procedimiento quirúrgico en el cual existe comunicación de una víscera hueca con el exterior. 


Algunas de las enfermedades que pueden terminar en una intervención como la ostomia son las siguientes:

  • Cáncer colorrectal
  • Colitis ulcerosa
  • Poliposis adenomatosa familiar
  • Infección abdominal
  • Absceso
  • Lesión de colon o recto
  • Oclusión intestinal 
  • Fistulas o heridas en el perineo 

El abordaje de la Fisioterapia en un paciente ostomizado puede dividirse en tres bloques:

Un primer bloque en el que se aborda de una manera pre-cirugía es decir de forma preventiva, para que el paciente que sabe que será sometido a este tipo de cirugía trabaje todo lo que implica:

 

  1. El patrón respiratorio: esto puede realizarse mediante movilizaciones costales y del diafragma, puntos gatillo, se buscará la flexibilización de las costillas.
  2. El tono muscular: mediante la valoración se verificara las restricciones articulares presentes a nivel de la columna en toda su extensión, la movilidad del sacro, la pelvis, también se buscara normalizar el tono de la faja abdominal que comprende el transverso del abdomen, los  músculos del suelo pélvico, psoas ilíaco, diafragma, se utilizarán ejercicios de flexibilización y/o tonificación dependiendo de si el paciente necesita bajar o aumentar el tono, se ubicarán puntos gatillos si se encuentran activos, estos se pueden tratar con diversas técnicas como la EPI, punción seca, electroestimulación etc. 
  3. El control postural: se valora la movilidad del paciente en las AVD, se le darán las indicaciones de cómo realizar ciertas actividades como agacharse, levantarse de la cama, realizar levantamiento de carga, se evaluara el estado de equilibrio, y se realizaran ejercicios para el control postural como el RPG, ejercicios hipopresivos, Pilates etc. 
  4. Se debe valorar si existe alguna disfunción como incontinencia urinaria o fecal o alguna disfunción de tipo sexual y dependiendo del grado de como este el paciente se puede conseguir un mejor estado post-quirúrgico. Si son pacientes con una patología previa es probable que tengan asociadas algún tipo de disfunción. Si corregimos estas disfunciones antes la cirugía mediante ejercicios que podrá realizar también después de la misma, se logrará tener pacientes sin patologías asociadas y con mayor facilidad de resolución, de esta forma también se evitan futras complicaciones post-cirugía. 

Un segundo bloque que abarca los pacientes que tienen establecido ya una ostomia definitiva, en este caso puede presentarse:

  1. Algunas complicaciones tardías luego de la cirugía como hernias, estenosis, prolapso o retracción, esto puede deberse a las retracciones fasciales producto de las adherencias además de una debilidad de la faja abdominal que genera la cirugía. Todo esto puede que facilite la aparición de estas complicaciones tardías o que sean la causa como tal, por lo que el abordaje de la fisioterapia será mediante la mejora del patrón respiratorio, del tono muscular, de disminuir el bloqueo articular y por supuesto de atacar las adherencias y cicatrices.
  2. También es parte fundamental el trabajo de la presión abdominal mediante el control de la faja abdominal y el control postural, ya que un aumento de la presión intrabdominal puede generar una disfunción en la zona de la estoma.
  3. El control postural en estos pacientes suele evidenciarse por el miedo de que la bolsa que mantienen donde se depositan las heces u orina puede verterse y por lo tanto adoptan posiciones de protección para evitar que esto suceda, por lo que se caracterizan por patrones posturales de cierre, este patrón postural genera un aumento en la presión intraabdominal por lo que es necesario reeducar al paciente e indicarle que no es favorable esta posición, también se valorara al paciente en el movimiento de sus AVD y se le indicará como debe realizar el movimiento al agacharse, levantarse de la cama o realizar algún levantamiento de peso, de igual forma se identificara si existe alguna afección en el equilibro, se aplicaran ejercicios de control postural y respecto a la referencia de dolor se debe buscar el origen de él bien sea producto de las posiciones de protección, de las adherencias o si está causado por otra afección. 
  4. Las disfunciones sexuales es una problemática que habitualmente refieren los pacientes, para ello se valora como está el control de la presión intraabdominal, si existe algún descenso visceral, el estado del tono muscular, la movilidad articular, como se encuentra la fascia abdominal y si hay presencia de adherencias, se indican ejercicios y se puede remitir a un especialista del área del psicología para que se parte de la ayuda emocional respecto a esta disfunción.

El objetivo de este abordaje fisioterapéutico es que el paciente mejore, tenga un control de la presión intraabdominal, no presente dolor, tenga un buen control postural además de un patrón respiratorio normal, que puedo realizar alguna actividad deportiva de manera controlada por un profesional, y por último que logre incorporarse en su actividad laboral.


El tercer bloque para los pacientes que han tenido la ostomia durante un periodo de tiempo y que se ha solucionado su problema o ha mejorado esa víscera y ha revertido el problema del estoma. Estos pacientes que se les revierte el estoma suelen sufrir de incontinencia urinaria o fecal, por lo que se comenzara el tratamiento de fisioterapia con el trabajo de:

  1. Normalización del patrón respiratorio, se valorará su faja abdominal y la presencia o no de adherencias, también importante valorar el suelo pélvico a nivel sensitivo, de reflejos, de control muscular y del esfínter y luego se le indicaran ejercicios, el complemento de la valoración de un nutricionista es necesario para que verifique las carencias alimentarias que puedan generar que las heces no sean tan consistentes si no de forma más diarreica, o que por lo contrario el paciente solo ingiere ciertos tipos de alimentos de forma continua  porque no le provocan esta condición.
  2. En función al control postural ya estos pacientes ya no tienen miedo a verter, pero por el tiempo que pudieron haber mantenido las posturas de protección pueden estar estos patrones posturales en cierre aun presentes, por lo que es necesaria su valoración y la reeducación postural, de igual forma es necesario valorar al paciente durante la realización de los movimientos de las AVD, verificar el equilibrio, realizar ejercicios de control postural y tener presente si el paciente refiere algún tipo de dolor buscando siempre el origen y las causas reales del mismo.
  3. Se buscara normalizar su presión intraabdominal por lo que es fundamental el trabajo del suelo pélvico, mediante el control del tono muscular de la faja abdominal y la postura. 
  4. Si existe alguna disfunción a nivel sexual se valorará su presión intraabdominal, ptosis visceral, el tono muscular, la movilidad articular, la presencia de adherencias en el tejido fascial abdominal, se aplicaran ejercicios y de ser necesario se puede solicitar ayuda psicológica para abordar el estado emocional y psicológico del paciente. 
  5. Y por último se ayudara al paciente a que vuelva a tener una vida normal, en a que pueda incorporarse a su actividad laboral, que vuelva hacer deporte o alguna actividad física de forma controlado por un profesional , todo esto mediante el control de la presión intraabdominal, que no refiera dolor, que tenga un buen control postural y patrón respiratorio.