En la actualidad existen muchas carencias respecto a la formación en Sexualidad, la educación sexual de hoy en día no cubre estas necesidades y aprendizajes de una manera sana y realista en la que la sexualidad forma parte del ser humano y de las cuales debemos conocer para poder vivirla. Las mujeres desde hace siglos siguen viviendo un contexto social de desigualdad, esto ha condicionado la salud porque la investigación los tratamientos, porque la forma de tratar los problemas relacionados con la sexualidad femenina han estado muy condicionados por el enfoque patriarcal y machista que ha hecho tratar de una forma muy distinta a un hombre o una mujer.
Además la sexualidad no es solo algo corporal si no que tiene toda una dimensión social, psicológica, emocional, mental y cultural que es imposible de dividir, por lo que el cómo vivir personalmente la sexualidad influirá en la atención de la sexualidad de los demás de una manera diferente; de una forma u otra los prejuicios van a estar presentes y lo que importa es darse cuenta de cuales son y cómo se pueden erradicar.
El conocer la fisiología de la sexualidad es muy importante y no solo biomecánicamente, por no es lo único existente en el cuerpo de la mujer, todo estas alteraciones están condicionadas por un sistema hormonal que confluye y fluye formado la correcta o incorrecta función sexual, y que también va influir psicológicamente en la mujer, por lo que importante entender que todos estos aspectos forman un todo que interactúa siempre entre sí.
El uso de palabras adecuadas o del lenguaje adecuado es necesario para perpetuar toda clase de estereotipos cuando se habla de sexualidad, esta forma de hablar y situar a las mujeres en un nivel de inferioridad ahora se le agrega una dimensión la que es necesaria la seguridad de las mujeres al ser atendidas por el profesional fisioterapeuta o matronas y que no sientan que al hablar o ser manipulada cualquiera de las zonas que comprenden el suelo pélvico bien sea de tejido perineal a nivel exterior o interno están siendo víctimas de alguna agresión, por lo que este aspecto puede crear una sensación de vulnerabilidad en el contexto sanitario, siendo necesaria la protección de ambas partes mediante la comunicación y la indicación de las maniobras a realizar y la finalidad de cada una de ellas.
Todas las personas somos machistas y esto se debe a que hemos crecido en un mundo machista con muchos estereotipos y prejuicios, el uso de las gafas violetas se trata de ir quitando esas situaciones que no nos permiten ver lo que realmente está pasando, por lo que se involucra el hecho de revisarnos en que como nos expresamos, como hablamos, como se entiende el dolor, la disfunción, los problemas sexuales de una mujer, como vivo mi sexualidad, como la transmito etc; por lo que revisarnos implica actualizarnos de forma continua y de esta forma perdonarnos por lo que ha pasado y seguir valorando las cosas con la finalidad de avanzar